Que el 2019 fue un gran año ya no es novedad, lo sabemos, lo hemos disfrutado y festejado como nosotros sabemos, como siempre decimos… a lo verde. Y no sólo por el título de 4ta división y el bicampeonato de 1ra, sino también por el campeonato logrado por las chicas de maxi vóley en la Asociación Cañadense, título que vale tanto o más que los de fútbol. Por ser una disciplina joven, con chicos y chicas que juegan por pasión al deporte, que no han tenido formación desde pequeños y porque se han sabido manejar prácticamente solos, partido tras partido sin gente que los aliente, más allá del apoyo de la institución. Una de las deportistas que practica la disciplina es Valentina Pasquini, con quién dialogamos. “A los 3 años empecé natación y fui hasta los 18, más o menos a esa edad también empecé gimnasia artística, un año en Independiente y después en Defensores con Florencia Corradini como profe. A los 13 hice hockey (primeros años de la disciplina en Defensores) y empecé vóley ese mismo año. A los 14 fui a tenis y todavía sigo jugando a veces. También hice fútbol femenino cuando lo daba Franco Denardo en Defensores” comienza la joven deportista de 22 años, haciendo un repaso por todos los deportes que practicó.
Como Valentina cuenta se inició en vóley con 13 años de edad cuando Defensores no competía en ninguna liga, sólo disputaba encuentros amistosos. Sus profes fueron Lorena Vicario, Luz Cosa y luego Mariano Charles. “En el 2017 entramos por primera vez en la liga, no me acuerdo como nos iba, lo que si recuerdo es que nos faltaba de todo, no sabíamos organizarnos adentro de la cancha, nos mataban los nervios, le queríamos pegar a la pelota como venía. Pero siempre estábamos ahí todas juntas acompañándonos y queriendo mejorar a full” recuerda Valente, como la conocen sus compañeras, sobre la primera experiencia en una liga. En el año 2018 se decide no participar en la Asociación. De todas maneras el grupo se mantuvo entrenando, mejorando para lo que vendría. Y lo que vendría sería un 2019 inesperado. “Para el 2019 mis expectativas eran ir a ganar cada partido y disfrutar por encima de todo. Y a medida que pasara el año ir mejorando. No sabíamos si estábamos para dar pelea porque nos faltaban muchas cosas por aprender, pero se dio que dentro de la cancha empezamos a jugar organizadas y a hacer todo lo que Mariano nos pedía. Así fuimos ganando los partidos. Nos dimos cuenta que estábamos para ser protagonistas cuando empezamos a ganar los primeros gran prix, pero creo que en realidad no caímos hasta los últimos” continúa su relato Valentina. Durante todo el año y por cuestión de cábala, ellas decidieron no informar sobre la competencia, sólo el resultado final de cada grand prix, pero pocos sabían que iban primeras y prácticamente arrasando en el certamen. El penúltimo encuentro era en Defensores, dónde ganando un partido, las chicas se consagrarían campeonas. A esa altura ya todos sabían, menos Valentina. “A mí me paso que me entere en el torneo que jugamos en el Club Defensores que podíamos salir campeonas, que con un partido que ganáramos ya estaba, pero porque soy medio colgada, capaz que lo dijeron y no escuche, por eso no festeje tanto cuando ganamos el primer partido. Cami saltaba como loca jajaja” recuerda entre risas la número diez del equipo. El torneo en Centeno finalizó, las chicas volvieron a ser primeras y luego si, desataron la alegría al canto “que de la mano de Mariano Charles, todos la vuelta vamos a dar”. “Ser campeonas me generó un montón de sensaciones, una alegría gigante, fue algo inimaginable, no sé cómo explicarte lo que sentimos pero fue hermoso todo. Ir paso a paso durante el año. Y la verdad creo que nunca nos sentimos las mejores, ni lo somos. Pudimos ganar el campeonato por nosotras y por el gran profe que tenemos”. Luego llegaría la fiesta del deporte verde, una fiesta que sería la antesala a la gran cena de campeones. Pero en ésta fiesta había una sorpresa, algo más por festejar. Valentina debía estar presente, pero por cuestiones de estudio se encontraba en Rosario y no tenía en los planes volver.
Tras mensajes, llamados, excusas, mentiras piadosas, se logró que ella se haga presente. “Cuando me dijeron que tenía que venir pensé que me podían dar el premio a mejor compañera, me parecía raro porque no sé si soy tan mejor compañera. No sabía que existía el premio de mejor jugadora, entonces nunca me lo imaginé. En primer lugar no me creo la mejor, siento que tengo compañeras que juegan mucho mejor que yo, por ahí tuve un buen año personalmente. Me emocioné muchísimo, me largué a llorar, me sentí muy feliz. Estaba agradecida con todos, con mis compañeros, con el profe, con el club, con vos por siempre poner lo mejor en la página. Fue muy lindo” expresa quién fue elegida por todos los técnicos como la mejor del 2019. En verano no pararon, siguieron entrenando, jugando encuentros. Tras idas y vueltas decidieron participar en 1ra división, pero el virus no las dejó ni comenzar el campeonato. “Decidimos tomarnos este año para mejorar mucho más, iba a ser duro en lo deportivo, sabíamos que no la íbamos a pasar bien pero decidimos crecer y subir. Pero cuando fuimos a jugar el comercial a Atlético nos encontramos con que podíamos dar pelea y ganar algún partido, pero bueno después todo terminó en cuarentena. Con nuestros compañeros hablamos todo el tiempo, casi todo el día, y con el profe también, por ahí manda un mensaje al grupo y nos quedamos charlando. El 5 de mayo fue el día del entrenador de vóley, así que le mandamos a Mariano, lo llenamos de mensajes, es que sin el esto no sería posible, es muy buen profesor, siempre intentando que mejoremos” agrega Valentina sobre lo que iba a ser el 2020 y finalizó con la ya archiconocida cuarentena. Para finalizar, Valentina sólo tiene palabras de agradecimientos. “Les quiero agradecer a mis compañeras más que nada, porque siempre están ahí presente, se fueron convirtiendo en amigas, con esa clase de personas es imposible pasarla mal. Tener un equipo así unido ayuda muchísimo. También agradecerle al club por apostar en esta disciplina, y además mandarle un saludo al profe, el mejor sin dudas”. Valentina Pasquini, o Valente para las amigas. Campeona y mejor jugadora maxi vóley 2019 aunque ella no se siente la mejor… humildad… es lo que la hace aún más grande.-